diumenge, 1 d’abril del 2018

Nunca aprendemos

Nunca aprendemos.
Y nos sentimos humillados por aquellos a los que considerábamos amigos, algo más que amigos. Y sí, nos comportamos como señores, con buena cara y sin mostrar el mínimo dolor. Y conservamos la dignidad, aunque la mancillen. Dignidad, que estupidez! Pero ahí seguimos, estoicos.
Ya no quedan lágrimas, el tiempo se las ha llevado.
Y una nueva capa se ciñe a nuestra coraza, justo cuando pensábamos que era el momento de volar sin ella.


dimecres, 17 de gener del 2018

Gente buena, gente amorosa y Lady Gaga

A lo largo de tu vida te encuentras con diversos tipos de personas, personas estúpidas, personas malas, anodinas, personas distantes, personas a la que te imaginas estallándoles la cabeza... Esto último siempre ha sido muy mío, y desde que vi el primer episodio, hace ya muchos años, de "A dos metros bajo tierra", ya no me siento tan bicho raro.

De vez en cuando, tenemos la fortuna de cruzarnos con personas generosas, con personas que sin saberlo, te insuflan amor. Estas tienen un aura bella, desprenden esa energía que te embriaga y te hace sonreír. Probablemente ni siquiera son conscientes de ello, pero ese sol que emanan, penetra en tu interior y te hace amarles. Si te besan, te quedas estúpidamente alelado, las emociones te embriagan y, a veces, te reprimes para no dejar caer una furtiva lacrima, como rezaba Donizetti.
Ellos no imaginan, tú tampoco, lo mucho que necesitas de ese casto beso, de ese contacto humano, de que te den calor, de que te den color con una pequeña caricia. Te hacen sabedor, aunque tu no quieras saberlo, porque tus pensamientos van como siempre a mil revoluciones, que quizá no eres tan fuerte, o quizá sí, pero que aunque disfrutas de esa soledad buscada, de esa soledad esperada, no eres inmune a los influjos del amor.

Todos lo necesitamos en nuestra vida, amor fraternal, amor filial, amor pasional, no importa, amor.

Gracias por esos besos, por esos abrazos, por esa desinteresada amistad, por esas entradas que rompen la tediosa rutina. Gracias.


dimarts, 14 de febrer del 2017

Unlovely Valentine versus Lovely friends

Es curioso como una fecha que jamás me ha importado por foránea para mí (en Catalunya se celebra St. Jordi con una rosa y un libro), está hoy tan presente.
Supongo que siempre ha sido así, pero yo no le di nunca mayor importancia.
Tampoco hoy la tiene, pero igual que me afecta ver a gente adoptando, teniendo hijos... se hace ahora más notorio que hay gente enamorada.


El fin de semana ha sido especial, con buenos amigos, disfrutando de estar juntos, sin necesidad de nada más. Justo aquello que tenemos cuando compartimos nuestros viajes a Canarias.
Especial es también el Center Stage, local inglés del Yumbo, donde con ingleses borrachines acabamos siempre cantando al son de un buen musical.

El problema es siempre el mismo. Cuando estoy solo, y no por la soledad en si, que nunca me ha dado miedo, sino por las vueltas que da la cabeza. Y es que quizá la táctica adoptada de no pensar jamás en nada y dejar que el tiempo corra, no es la adecuada en pleno divorcio, ya que este está presente sí o sí.

Volviendo al Center Stage, entre otros vídeos, me gusta especialmente uno que ponen con pequeños trozos de canciones de Cilla Black y Dusty Springfield, desde sus comienzos hasta que acabaron cantando juntas (creo que tan solo una canción), estando ya granaditas.

Aunque sus historias cantadas no son las mismas que yo vivo, estos días no paro de escucharlas.
Con la cabeza en pie y algo de tristeza:
A quien corresponda, Feliz San Valentín.





divendres, 27 de gener del 2017

Imposible resetear

No pienses, no imagines, no llores más.
Ni un segundo, ni un instante o te devorará por dentro.
Construye piedra a piedra, de nuevo, la dura coraza.

No pienses, no imagines, no llores más.
Ni un segundo, ni un instante o vendrá a por ti y te sumirá en la oscuridad más absoluta.
Sonríe, trabaja y álzate de nuevo.

No pienses, no imagines, no llores más.
Ni un segundo, ni un instante o se instalará en tu cabeza.
Duerme, fluye, deja que la vida te lleve.

Pero el insomnio ha vuelto, el miedo a vuelto, el desasosiego, las vueltas en la cama.
Y estoy agotado, necesito el reposo, necesito dormir, pero no puedo, tengo miedo.
Y sigue lloviendo, y el frío se instala en mis huesos.
Y yo me consumo y el cielo está gris, y llueve y llueve.

Necesito evadirme, volar... pero soy fuerte.
Resistiré, porque soy fuerte.
Volveré a amar algún día, porque soy fuerte.
Viviré de nuevo feliz, porque lo supero todo.

No pienses, no imagines, no llores más.
Ni un segundo, ni un instante.

Y en mi corazón, como en el cielo, llueve.


dilluns, 19 de desembre del 2016

Mallorca o... Sitges y fin

Despierto a media noche. Intento alejar mis demonios sin éxito.
Caigo en un estado que baila entre la apatía y un profundo pesar.
Como Ártax en el Pantano de la tristeza me dejo caer en una debacle abúlica  y a pesar de no poder dormir, no saldría de la cama.
Y como decía la vieja Morla, nada tiene importancia, todo da igual.

 
Como no podía ser de otro modo, hoy el día se levanta gris, frío y triste.

dilluns, 12 de desembre del 2016

Intocables... y hundido

Largas tardes al sol, la arena del desierto que acaricia mis pies.
Amigos, risas y música. Siempre música, para todo, para alegrarme, para reír, para bailar, para llorar, para serenarme y para madurar...
Días de calma, espacios para la compañía y para la soledad. Para tomar distancia y ver las cosas desde otro punto.



Y tras la calma llega la tormenta.
Empieza hoy una semana especialmente dura que culminará en ese adiós definitivo.
La tristeza, siempre acechante, afronta la recta final. Recta sin ganadores ni premios. Recta de lágrimas y amargura, de remordimientos, de clavarse dagas en el corazón.
Pero ahí, en medio de un mundo diminuto pero infinito, mis contradicciones no parecen tener importancia.




Que belleza, que fragilidad, que paz y a la vez esas lágrimas de alegría y tristeza sempiterna al sentirla junto a tu pecho. Cuando te mira con esos ojos pardos que aún no ven el mundo, pero que traspasan tu alma. Y ésta se llena de gozo al sentir esa brecha que estará eternamente abierta. Esa humilde esperanza de "tal vez un día".


diumenge, 6 de novembre del 2016

The bad man

My love is not a vengeance.
I never lie.
But, sometimes, I feel like a bad man, like a sad man.